''Close your eyes...

''Close your eyes. Just do it. Now, imagine...You and I. You're my girl. Don't cry, I don't wanna see any tear while you're reading this.
I know you exist, I know you love me with all your soul, I know. But please, don't believe what people say to you about me, I love you.
I'm sorry, I can't be with you now, but you should know that you're in my head and in my heart. I close my eyes and I imagine you're here with me.
Don't cry, just smile. Smile with your smile, the most beautiful smile in the wole world. If you do it, I'm happy, so happy. You already know that I am far away from you, but I still love you. You're my support, you're my girl and you will always be. Thank you for being happy the other day. I know you saw me in metres of distance and you were dying for hugging me, I know it. But I want you to know that I felt the same. One day will happen again because I hope that. The only thing stronger than fear is hope. Don't you remember? Well, I have it. I know one day I will see you, I will hug you. Remember: the kilometres can't separate us. I love you, don't forget it.
Niall.''

viernes, 26 de julio de 2013

''Mami, estoy enamorada de Niall Horan.''


Capítulo 18. -Te quiero, osito panda.-

[Dos horas más tardes en un bar cualquiera de Barcelona]

-Natassa, créeme que ella es sólo una amiga.-no quiero escucharle.-Escuchame, te lo prometo.

-Y si es sólo una amiga, ¿por qué no me la habías presentado?

-No había tenido la oportunidad.

Le miro y levanto las manos.

-Ah, ya, seguro.

-Mañana voy a ir a comer con ella y con dos amigos más, ¿te quieres venir para que te des cuenta que es sólo mi AMIGA?.-me dice resaltando la última palabra.-

-Mañana quedé con una amiga de aquí, de Barcelona, para comer. Dime el restaurante y si eso, nos pasamos.-tenía una idea.-

-El restaurante es _____, sobre las 14:30 estaremos ahí.-vuelvo a apartar la mirada y pido un vodka.- Natassa, ¿de verdad no te das cuenta de qué eres lo único que necesito? ¿no te das cuenta que eres lo único que tengo? ¿no te das cuenta que eres la chica que elegí entre millones? Date cuenta por favor, sé que soy un tonto por no habertelo dicho, tal y como van las cosas, con tanto rumor...es normal que desconfíes, pero por favor, sólo te quiero a ti, eres la chica que me enamoró con palabras, que me enamoró sin saber como era, eres aquella que con una mínima tontería me saca una sonrisa, eres esa chica que necesito a mi lado para ser feliz, y que si la pierdo, no sería nada. Natassa, has cambiado mi mundo y no me había dado cuenta, llevamos dos horas enfadados y ya te echo de menos, imagina que sería de Niall sin ti, no sería nadie. Natassa, te quiero, ahora y siempre, eres mi española.

Sus palabras me dejan con un nudo en la garganta, no quiero llorar, joder, no quiero llorar. Aquí la tonta soy yo por desconfiar de él. Puto orgullo. Sé que está con la mirada al suelo aguantándose las ganas de llorar, lo conozco demasiado bien. Trago saliva, me bebo el vodka de un trago y me voy a la pista a bailar. Mientras lo hago empiezo a llorar y observo como Niall me mira. Me mira, me mira, me mira y se va. Sale del bar. 

Me siento una mierda, pero debe de ver que no soy la débil en la pareja, aunque así sea, debe de ver que tengo mi carácter. Yo le quiero, pero soy demasiado orgullosa, eso es lo que más odio de mi. La música suena más alta y no me deja pensar bien, así que, sigo bailando. 

[...]

-Natassa, ¿qué haces ahí?-la voz de Zayn me hace sobresaltar.-

-Nada...me dolía la cabeza.-se sienta a mi lado.-¿Has hablado con él?-niego con la cabeza.-Natassa, no debes desconfiar de Niall, es un buen chico, lo sabes, nunca haría nada para perderte, le costó mucho encontrarte, y lo sabes. A demás...

Antes de que siguiese con su royo me levanto.

-Si vas a darme un sermón, me voy a la iglesia.-empiezo a andar furiosa. Zayn iba detrás mía. Yo andaba más rápido.- Zayn, déjame, sé ir solita hasta el hotel.

-¿Estás loca? ¡Son las cuatro de la mañana!-me alcanza y me agarra de un brazo pegándome a él.-He venido en moto, vamos.

-No, ¡ni loca me subo contigo en moto! ¿piensas que olvidé todo lo que me dijiste? Conozco Barcelona mucho mejor que vosotros cinco juntos, ahora, suéltame.-hice un esfuerzo para que me soltase el brazo pero no lo hizo.-Zayn, ¡qué me sueltes!

-No.-eso es un no rotundo. Silencio. Me iba haciendo cada vez más pequeña bajo su fría mirada castaña.-No pienso dejar que la novia de mi amigo vaya por ahí sola tan tarde, ni en tus mejores sueños.-Zayn me suelta el brazo y hago el amaño de salir corriendo cuando me coge de la cintura y me vuelve a pegar a él.-Natassa, por favor, Niall estará preocupado.

No vuelvo a poner resistencia y nos dirigimos a la moto. Yo algo incómoda porque no es mi plan ir por la calle con Zayn y que éste me lleve agarrada de la cintura, ¡podrían haber fans o paparazzis! ¡podrían hacer fotos y Niall las podría ver!
Oh, mi Niall. Por mi jodida culpa lo estará pasando mal, ¿por qué soy tan cabezona? Zayn tiene razón, no tenía que haber desconfiado de él...pero en parte, me ha dado motivos. 

Sin darme cuenta paramos enfrente de una gran moto negra. Zayn saca un casco, me fijo bien y lleva su chaqueta de cuero. Como me frustraba que se la pusiese. Me pasa el casco y al dármelo, toca mis manos.

-Dios Natassa, estás congelada. 

-No es nada, siempre lo estoy.

-Ponte el casco,-se quita la chaqueta.- y mi chaqueta, no quiero que llegues hecha un cubito de hielo.-le hago caso y me pongo primero su chaqueta y después el casco. Las mangas me cuelgan y Zayn se ríe.-Pareces un pingüino.

-Cállate y arranca la moto.

Sin decir nada más, Zayn se pone rumbo al hotel.

[...]

Abro la puerta de nuestro cuarto sin hacer mucho ruido. Niall estará durmiendo. Entro con sumo cuidado al comedor y de repente las luces se encienden. Niall está sentado en el sofá. Me mira de arriba a abajo y cuando veo que está mirando la chaqueta de Zayn sonrío.

-Siempre me han gustado los morenos.-no sé por qué sigo con ésto. Quiero arreglar las cosas.-

-Pues tienes un rubio en tu vida que nunca te piensa soltar.-me mira fijamente.-

Sus palabras me duelen a la vez que me encantan, pero no sé por qué no quiero dejarme rendir tan fácil. Me quito los zapatos en el suelo, luego me quito los pantalones y los dejo encima del respaldo del sofá, lo acaricio.

-Entonces, ¿quién va a dormir aquí?-mi pregunta sorprende a Niall que me mira atónito.-

-Dormiré yo...-suspira y baja la mirada al suelo.-Pero que sepas que echaré de menos abrazarte mientras duermes.

Joder, ¿por qué soy tan cabezona? Me doy la vuelta para que Niall no pueda ver mis lágrimas y me encierro en nuestro cuarto. Me quito la cazadora de Zayn y la dejo a los pies de la cama. Me quito mi camiseta y la tiro al suelo. Sólo con ropa interior me acerco a la maleta de Niall, me agacho y la abro. Saco una camiseta suya y me la pongo. Yo también le voy a echar de menos. 

Me acuesto en la cama con la camiseta de Niall, ya que, huele a él. 
<<Que masoquista que soy conmigo misma.>> Es lo último que pienso antes de dormirme.

[...]

Me despierto al escuchar unos pasos cerca de la puerta. Bajo la mirada hasta el principio de la puerta y veo los pies de Niall. Veo como el pomo de la puerta gira débilmente hasta que se abre despacio, me hago la dormida. Se acerca con pequeños pasos hasta la cama. Sé que me está mirando, lo noto. Noto como deja su peso en la cama y se acerca a mi, no sé qué va a hacer, pero sea lo que sea, no lo hace. Suspira y sale de la habitación. 

Tienen razón, los dos somos unos grandes cabezotas. De momento, España 0; Irlanda 0.

[...]

Mi móvil suena, lo busco pero no lo encuentro. Me vuelvo loca buscándolo por la habitación pero no está por ahí. Ni rastro de mi móvil. Salgo del cuarto y se escucha más alto, entonces recuerdo que lo dejé en los pantalones, y los pantalones, en el sofá. 
Voy corriendo hasta él y lo cojo, es Maira, mi amiga de Barcelona.

-Nats, te he llamado como cincuenta veces, ¿te has quedado dormida?

-Eres una exagerada. Y no, no me he quedado dormida, estaba en la ducha.-miento.-

-Pues mona, vas justa de tiempo, porque en media hora hemos quedado.-miro el reloj y son la una. Mierda, no me acordaba.-

-Ya, ya, pero como sabes soy muy rápida y llego puntual a todos los sitios.-mi comentario le hace reír porque todo el mundo sabe que es difícil que llegué puntual algún lado.-

-Venga, nos vemos en media hora. Voy a recogerte, a ver si eres puntual por primera vez en tu vida.

Cuelgo antes de que me eche la bronca. 
Miró el historial de mi móvil, tengo cinco llamadas perdidas de Maira, tres de Zayn, siete llamadas y cuatro mensajes de Niall.
Abro los mensajes.

''Natassa, por favor, te echo de menos, hablemos las cosas, te necesito.
                                        Te quiere, tu Niall.                                               ''

''Sólo dime que quieres arreglar las cosas.
                     Nialler xx.                              ''

''Eres una egoísta, sólo piensas en ti. Yo confío en ti, ¿por qué tú no en mi?
                                                   Niall.                                                               ''

''Perdón por mi anterior mensaje, pero no puedo más con los nervios, dime al menos que estás bien y que has dormido algo, yo no he dormido nada, no he podido parar de pensar en ti.
                                                             Tu pequeño.                                                                        ''

Leer sus mensajes me hacen mierda por dentro, es que mi tía siempre me lo ha dicho: 
''Eres demasiado masoquista contigo misma, hay que tener paciencia para aguantarte.''

Tiene razón, Niall tiene demasiada paciencia conmigo, yo ya me hubiese mandado a la mierda.
Miro el reloj y son la una y veinte, en diez minutos dudo que me de tiempo a arreglarme y estar abajo puntual.

Cojo unos vaqueros ajustados y una blusa de vestir, me visto lo más rápido posible, me hago un moño y me doy un poco de sombra. Me miro al espejo ¡lista!
Estoy cogiendo el ascensor cuando mi móvil suena, es Maira.

-Lista, estoy bajando.

No digo más y salgo del hotel, ahí está, tan puntual como siempre.

[...]

Llegamos al restaurante _________. Maira me ha dicho que no nos podemos permitir tanta clase, yo le he dicho que se olvide de ese problema.
Entramos y es un lujoso restaurante. Las paredes son de color crema hasta la mitad, luego un rodar separa al color blanco. Las lámparas son grandes, parecen arañas, y en cada pata hay pequeños diamantes. A la izquierda hay un salón lleno de mesas redondas y lujosas; a la derecha, otro comedor que pone: ''sólo reservas especiales.'' Pienso que Niall y sus amigos comerán ahí.

-Señoritas, ¿tienen reserva?-nos pregunta un mêstre con un gran bigote negro.-

-No, en realidad no.-dice Maira mirando asombrada nuestro alrededor.

-Sí, sí que tenemos. Una mesa al nombre de Horan.-el mêstre me mira y luego mira una carpeta que hay como mínimo mil nombres.-

-Sí, por aquí.

Entramos a un gran salón, la gente de alrededor nuestra nos mira. La verdad es que no vamos, que digamos, vestidas para estar dentro de este restaurante. 
Llegamos a una mesa que está al final de la sala, en un cartel pone: ''Horan.''

-He aquí vuestra mesa, señoritas.

-Disculpe, pero es que el señor Horan vendrá más tarde, quiero una mesa para nosotras dos. 

-Por supuesto.

Caminamos detrás de él hasta otra mesa, justo a tres mesas alejadas a la de Niall. Nos sentamos y el mêstre nos da la carta.

-¿Se puede saber qué haces, loca?

-Mira la carta y pide todo lo que quieras.

-Pero, Nats, ¿cómo vamos a pagar esto? Si ya reservar la mesa cuesta 100 euros.

La miro con cara de pillina.

-¿Y quién dijo que íbamos a pagar nosotras?

Pedimos todo lo que podemos comer y más, y justo cuando vamos por el postre, aparece Niall con sus amigos.
Va precioso con un traje gris oscuro y el pelo despeinado. Sus ojos azules se ven aún más azules. Se me cae la baba al verle. Él me mira y en seguida aparta la mirada de mi.
Se ve que es una comida importante porque van todos muy bien arreglados. 

Levanto la mano llamando al camarero.

-¿Qué desea señorita?

-Todo lo que hemos comido, lo pagan la mesa del señor Horan, dígale que es parte de la señora Horan.

-Sí señora Horan.

Nos levantamos y salimos del restaurante, y cuando estamos fuera, no puedo aguantarme más la risa y me empiezo a reír.

-¿Qué has hecho loca?

-Sólo nos hemos invitado a comer.

[...] 

Vestida sólo con la camiseta de Niall y unos calcetines, me desmaquillo. Todavía me queda un ojo cuando alguien toca a la puerta. La abro y es él. Me quedo mirándole. Va demasiado sexy con la chaqueta colgada al hombro, sin zapatillas y con la camisa desabrochada. Creo que se da cuenta porque hace un gesto para que cierre la boca.

-Bueno, ¿qué quieres?

-Déjame entrar, necesito cambiarme.

Me aparto de la puerta y lo dejo entrar. Me siento en la cama mientras él se cambia. Intento no mirarle mucho porque me sonrojo al recordar que hace un día hicimos el amor por primera vez. 
Cuando sólo está con sus pantalones de pijama se acerca a mi. 

-Sólo escúchame.-asiento. Necesito que me hable, le echo de menos.-Soy un completo estúpido por haberte hecho dudar y no haber ido detrás tuya para solucionar las cosas. Sólo con eso hecho daño a los dos. Sólo quiero decirte que me perdones y que me des aunque sea un simple abrazo, que te echo de menos y anhelo tu contacto.

-No, te equivocas Nialler, aquí la estúpida he sido yo por dudar de ti. Pero entiéndeme, tienes a millones de chicas y me elejiste a mi, pues no lo entiendo, pudiendo salir con una modelo ó yo qué sé...entonces cuando Harry me enseñó esas fotos tuyas con esa chica tan perfecta, me hice mierda, Niall. Subí al cuarto y vi menciones, más menciones de odio y claro, vi que tenían razón, que te habías cansado de una pesada y tonta. Y Niall, los nervios me pudieron y la pague mal contigo sin merecértelo. Perdóname tú a mi pequeño, porque quiero que seas el único rubio que me enamore cada día un poco más. Porque cuando estoy mal, no hace falta que diga nada, tú simplemente vienes y me abrazas, ya está, sólo con ese simple gesto me sacas una sonrisa. Y te juro que pienso confiar en ti porque siempre me haces sentirme única, querida y a gusto conmigo misma, y eso, no es tarea fácil. Así que, la única gilipollas soy yo porque no he sabido valorar el premio que me ha tocado con tenerte a mi lado.-Niall está a punto de llorar.-Y hoy, ahora mismo, soy yo la que te dice: ven que te de un abrazo que sé que lo necesitas.

Niall viene corriendo y se abalanza sobre mi. Me abraza fuerte. Pone sus manos bajo mi espalda y me coge a peso. Me engancho a su cintura y se pone de pie.

-Una vez leí una mención de una chica que me ponía: algún día te susurraré te quiero en el oído, te lo prometo pequeño. ¿Sabes de quién podía ser?

Me acerco a su oído y le digo en un cálido susurro te quiero. Niall sonríe y me abraza más fuerte. 

-Lo conseguiste, y estoy muy orgulloso de ti grandullona.-me mira y me besa.-Te quiero, osito panda. 

-¿Osito panda? ¿no te valía ya con pequeña, mi española, grandullona, princesa, cabezona? ¿ahora también osito panda?

Anda hasta el espejo y me miro. Tiene razón, enganchada a él y con un ojo sólo pintado, parezco un osito panda. 

Niall se tumba en la cama y me siento encima suya. Le miro a los ojos. 

-Me encantan tus preciosos ojos, peque. 

-Yo los odio, sólo me dan problemas.

Esa frase me desconcierta. 

-¿Por qué?

-Te tengo que contar una cosa.-trago saliva, yo también tengo que contarle algo.-

-Yo también.





















lunes, 1 de julio de 2013

''Mami, estoy enamorada de Niall Horan.''


-Capítulo 17.-
[Medio mes más tarde en una terraza de un hotel en Barcelona]

Alguien me besa la nuca. Gimo. Giro la cabeza y veo la sonrisa de Niall, pero está cansado, se le ve en la mirada. 

-¿Te duele le cabeza pequeño?-asiente.-Tumbate aquí anda. 

Me levanto y él se tumba en la misma posición en la que estaba yo, boca abajo. 
Busco a los demás chicos y los encuentro en la piscina. Me hacen un gesto para que vaya con ellos  pero yo niego indicándoles que a Niall le duele la cabeza. 

Me cojo otra hamaca y me la pongo al lado de la de Niall. Me pongo las gafas de sol y me pongo a tomarlo. Pasa un tiempo cuando noto unas manos por mis hombros, detrás de mi. Niall está echándome crema. Le sonrío. Se acerca a mi oído y me susurra ''levanta, vamos a saludar a las fans, son de las tuyas.'', su comentario me hace reír y me levanto. 
Me agarra de la cintura y vamos al balcón. En ese momento las fans gritan, yo sonrío y las saludo. Sé que ella están conmigo, son de las mías. 

Después de estar un rato saludando, Niall empieza a besarme el cuello. Yo riéndome lo aparto. Me coge de la cintura y me besa en la comisura de los labios. 

-Iros a vuestra habitación tortolitos.-nos grita Louis.-

Niall me mira sonriente, me coge de la mano y me arrastra al interior del hotel. Sé lo que quiere, y ya me he negado cuatro veces...creo que ésta se la merece. 
Entramos al ascensor. Me agarra de la cintura y me pega a él. 

-¿Quieres?-asiento timidamente.-No tengas miedo peque, tranquila. 

Salimos de éste y entramos a la habitación. Estoy nerviosa y él parece darse cuenta porque me abraza. 

-¿Estás segura?, si quieres lo dejamos para otro día...-le beso, ese beso se va haciendo más intenso. 

Me empuja y me tira a la cama. Se sienta en mi cintura, me quita la camiseta y él la suya, me vuelve a besar el cuello. Se me ponen los pelos de punta. Sus besos van bajando, por el cuello, por el hombro y por la clavícula. Un gemido sale de mi boca. Niall me sonríe. 

Me besa la boca, luego la barbilla, vuelve a bajar; besa mi mentón, mi garganta. Otro gemido. Siento calor. Sigue besando. Me besa la barriga y se para en el ombligo. Baja poco a poco hasta mi Venus donde se para. Me mira y yo vuelvo a asentir. 

Se pone de pie y poco a poco me quita el pantalón. Ahora estoy más nerviosa que antes. Niall también se quita el suyo. 
Los dos en ropa interior nos miramos. Se vuelve a sentar sobre mis caderas. 

-Tranquila, cuando digas, paro.-gesticulo un gracias y pone sus manos en mi espalda. La acaricia con un dedo y me desabrocha el sujetador. Sonrío nerviosamente. Se tumba encima mía y me da un dulce beso.-Cariño, relájate. 

Respiro profundamente. Nos quita las únicas prendas que nos quedan y Niall suavemente empieza hacerme el amor. Yo cierro los ojos y me agarro a la sábana. Niall sigue. Hace calor. 

-¿Todo bien peque?-asiento.-

Continúa haciéndomelo dulcemente. Mientras lo hace me va dando besitos por todo el cuerpo. Niall empieza hacerlo un poco más rápido y yo, vuelvo a gemir.
Poco a poco, lentamente y cariñosamente, me hace el amor.

[...]

Me hace cosquillitas por la espalda y me besa la nuca. Sonrío e intento mantener la respiración regular. 

-¿Te apetece un baño?.-miro la hora, son las diez.-

-En la piscina por favor, tengo calor.-Niall se ríe dulcemente y me besa el pelo.-¿De qué te ríes?

-De nada, no me río de nada.

-¿Te hago gracia?

-Es normal que tengas calor princesa, siempre, después de hacerlo hace calor.-se levanta, saca un bañador y se lo pone.Saca un bikini mío.-Ven anda.

Me acerco a él. Me pone la parte de arriba, me doy la vuelta y me lo abrocha. Me vuelve a dar un beso en el hombro, se agacha y me sube la parte de abajo. Cuando me lo está subiendo y sus dedos rozan mis muslos, siento un escalofrío. Niall termina de subírmelo. 

-Gracias...ha sido mágico.-sonríe y me abraza.-

Coge su camiseta y me la pone. Nos ponemos las zapatillas y salimos. 
Cuando llegamos a la piscina están Harry y Liam. Liam me mira sonriente y yo le miro y me sonrojo . 

Harry sale de la piscina, me coge y me tira. Niall se tira detrás. Entre risas, sin darme cuenta, Harry me agarra del brazo. 

-Te tengo que decir una cosa.